Llevar mascarillas y guantes como precaución para protegernos contra el coronavirus puede tener un efecto inverso y contribuir a expandir más la infección, alertan expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Si se quieren utilizar, es esencial saber ponérselos, llevarlos y quitarlos correctamente para que resulten efectivos; si no, “puede ser peor el remedio que la enfermedad”, advierten.
En un momento en que España encara el pico de la epidemia por Covid-19 y hay cerca de 40.000 personas infectadas, es habitual ver a personas que salen a la calle para ir a trabajar, o que van a la compra o a pasear al perro llevando mascarillas de todo tipo, guantes de látex.
“Llevarlos nos puede dar una falsa sensación de protección y hacer que nos relajemos y olvidemos las principales medidas de seguridad, que son lavarse las manos intensamente, mantener una distancia de seguridad entre personas de dos metros y, sobre todo, quedarse en casa, confinados”, asegura Júlia Vergara-Alert, investigadora de coronavirus en el Centre de Recerca en Sanitat Animal (IRTA-CReSA).
La OMS solo recomienda llevar mascarillas en público si se sospecha que estamos infectados. Y en ese caso, hay que quedarse en casa, en cuarentena, y contactar con sanidad para que nos lleven un seguimiento.
(Fuente: La Vanguardia)