El test de alcoholemia arrojó 0,64 gramos por litro de alcohol en sangre.
Personal de la Sección “Virasoro”, dependiente del Escuadrón 57 “Santo Tomé”, se encontraba llevando a cabo treas de control sobre el trazado de la ruta nacional 14, en su cruce con la 120.
Un automóvil que se aproximaba cambió de dirección bruscamente, dándose a la fuga. Ante esta situación, y ante la sospecha que se estaría cometiendo un ilícito, un grupo de efectivos procede a seguir a una distancia prudencial al rodado que había escapado, el cual hacía caso omiso a las balizas y a las indicaciones que los uniformados le brindaban con la utilización de un megáfono.
Después de haber recorrido casi 10 kilómetros, el automóvil detiene su marcha en proximidades a la intersección de la ruta nacional 14 y la provincial 39. Al aproximarse, los gendarmes solicitaron a los ocupantes, dos masculinos que desprendían un fuerte olor a alcohol, que presenten la documentación propia y del vehículo, a lo cual se negaron rotundamente. Asimismo, ofrecieron resistencia cuando se les indicó que desciendan del vehículo.
Producto de la insistencia, ambos ciudadanos accedieron a descender y presentar la documentación solicitada, resultando en dos ciudadanos mayores de edad. Dentro del vehículo se halló únicamente dinero en efectivo. Habiendo anoticiado al Juzgado Federal y a la Fiscalía Federal de Paso de los Libres, se orientó que ante la presencia de testigos se labren las actuaciones por resistencia a la autoridad, así como el traslado de los involucrados, el vehículo y el dinero hasta el asiento de la unidad.
Personal de Criminalística y Estudios Forenses llevaron a cabo el conteo y cotejo del efectivo, resultando en un total de $ 635.070 en billetes de distinta denominación, monto que pertenecía en partes a ambas personas. Asimismo, se dio intervención a la Administración Nacional de Seguridad Vial (ANSV) para que practique el test de alcoholemia, arrojando 0,64 g/l de alcohol en sangre para el conductor, lo que motivó a retener su licencia, el labrado de la multa correspondiente y la retención preventiva del automóvil hasta ser entregado a alguien designado por el dueño. Ambas personas continúan en libertad, supeditados a la causa.