El teléfono celular le volvió a generar un dolor de cabeza a Susana Giménez (74). En junio la diva había tenido un divertido blooper, cuando por unos minutos su smarphone hizo una transmisión en vivo a través de Instagram en la que, días después de ganar el premio Martín Fierro de la Gente, afirmó: “Marcelo Tinelli no es querido. Salió segundo con Mirtha, con 15 puntos. ¡Y yo tenía 41!”.
En ese entonces, Susana se expresó horrorizada con la tecnología y confesó: “¡Yo no quiero tocar más el teléfono! Soy peligrosa. Es una porquería. Después me di cuenta de que había apretado lo que dice vivo… Y bueno. Es un horror. Fui yo la que lo apreté. El arquitecto me estaba preguntando (si lo querían a Marcelo) porque no sabe. Qué se yo… ¡Un horror!”.
Pero el hombre es el unico animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Y Susana Giménez puede dar fe de eso: esta vez publicó una selfie de su cara a cara lavada, mientras estaba de entrecasa, recostada en su cama. Las imágenes se viralizaron en el instante, más allá de que la conductora eliminó rápidamente el posteo de la foto.