Posadas sigue conmocionada por la brutal muerte del chofer de Uber, Jorge Daniel Acuña, crimen que tiene como único sospechoso a un policía. La autopsia realizada a la víctima de 52 años, confirmó que recibió dos disparos, uno en la espalda y otro en la cabeza.
El balazo en la cabeza no penetró el cráneo y quedó alojado en el habitáculo del Fiat Siena blanco que conducía. Además, los peritos revelaron que Acuña fue golpeado en la cabeza con la culata de un arma, lo que añade un grado de brutalidad de la agresión.
En relación con el caso, la Policía de Misiones secuestró once teléfonos celulares, que serán analizados por la Secretaría de Apoyo para las Investigaciones Complejas (SAIC).
Entre los dispositivos incautados se encuentra el del principal sospechoso, un exagente de la Policía de Misiones, Raúl A., de 26 años, y los teléfonos de su pareja, también miembro de la fuerza policial, y del dueño del vehículo que Acuña usaba para trabajar, un hombre de nacionalidad colombiana.
Los investigadores también han recuperado el celular de la víctima, cuya última conexión fue el pasado lunes a las 17:33 horas en la zona del bypass, cerca del lugar donde se encontró el cuerpo de Acuña el viernes por la noche.
Con estos datos y el resultado de la autopsia, las autoridades esperan esclarecer el caso y presentarlo ante el Juzgado de Instrucción Uno, dirigido por Marcelo Cardozo. Las hipótesis sobre el motivo del crimen varían entre un robo seguido de muerte, una posible relación extramatrimonial, o un ajuste de cuentas.
Las diferentes cámaras que están apostadas por la ciudad fueron determinantes para la detención del sospechoso de 27 años, quien fue visto subiéndose al auto de la víctima en inmediaciones al cementerio y horas después lo detectaron bajando del mismo pero sin la presencia del conductor del uber dentro del rodado.