La reciente Resolución 2019/25 publicada por el Gobierno nacional reconfigura el sistema de residencias médicas en el país, transformando a los residentes en becarios sin relación laboral directa, lo que implica la pérdida de derechos clave como aguinaldo, aportes jubilatorios, obra social, ART y seguro de mala praxis a cargo del Estado.
Esta medida, que ya generó rechazo en varios sectores de salud, representa un fuerte retroceso en términos de derechos laborales para los profesionales que están en proceso de especialización. En cambio, Misiones mantiene un modelo propio y estable, gracias a la Ley Provincial XVII N° 75, que garantiza un régimen laboral completo con derechos y beneficios plenos para sus residentes durante su especialización.
Con el nuevo esquema nacional, los residentes deben optar entre dos modalidades de beca: una a través de la institución donde realizan la residencia, sin aportes ni retenciones, pero con posibilidad de adicionales; y otra dependiente del Ministerio de Salud, con descuentos previsionales, pero sin garantías laborales plenas. Esta cambio impacta principalmente en quienes se desempeñan en hospitales nacionales, como el Garrahan, y genera incertidumbre en miles de jóvenes profesionales.
En contraste, Misiones reafirma su modelo propio y autónomo de residencias médicas, establecido por ley provincial. En la provincia, los residentes tienen un régimen laboral formal con aportes jubilatorios, cobertura de obra social, vacaciones y otros beneficios que garantizan condiciones laborales dignas. La Ley XVII N° 75, que regula este sistema, fue incluso fortalecida durante la pandemia para mejorar las condiciones salariales del sector.
Funcionarios y legisladores misioneros defendieron el modelo provincial
El subsecretario de Recursos Humanos del Ministerio de Salud Pública, Rodolfo Fernández
Sosa, fue categórico al referirse a los cambios impulsados por Nación: “Esto es un paso
hacia atrás en el sistema de residencias, buscando implementar siempre ningún tipo de relación laboral. No responder los con los derechos logrados”. Aclaro, también, que la Resolución 2019/25 no afecta absolutamente ‘nada’ en Misiones, ya que “en nuestra provincia, solo 120 de los 397 residentes están contratados por Nación”, y que lo que reciben desde el gobierno nacional -350.000 pesos mensuales- “representa poco más del 30%” de su ingreso total. El complemento, que eleva el ingreso promedio a 1.200.000 pesos, lo paga la provincia.
Fernández Sosa explicó también que “para que todos los residentes puedan cobrar lo
mismo, dependen de Nación o Provincia. La Provincia se hace cargo de un adicional que
equipara los ingresos”, y que esos montos se actualizan conforme a los acuerdos salariales
del sistema de salud pública misionero.
Por su parte, la médica pediatra y diputada provincial del Frente Renovador Neo, Lilian
Capasso, expresó durante una sesión legislativa que la resolución nacional “precariza
toda posibilidad de ejercicio de su profesión”. En contraste, destacó el sistema local:
“Aquí se tiene un régimen laboral estable, con cobertura incluso ART, por Ley XVII No 75 que permite que los médicos residentes tengan seguridad laboral, seguridad de la mala praxis por lo que hacen”. Recordó que en 2020, durante la pandemia, la provincia modificó esa Ley para garantizar mejores condiciones y reiteró: “Nuestro gobierno da certeza, seguridad y acompaña cada cambio necesario para que los médicos ejerzan con dignidad”.
Una ley provincial que garantiza formación y derechos laborales
Misiones cuenta con un sistema sólido y estructurado de residencias médicas, sustentado
por la Ley XVII N° 75, que regula integralmente la formación de los profesionales de las
ciencias de la salud. Esta normativa no solo establece el carácter formativo y científico-
asistencial del proceso, sino que vincula a los residentes bajo contrato en relación de
dependencia, con remuneración, cobertura social, aportes previsionales, vacaciones y un
régimen disciplinario específico. Además, fija como obligatoria la dedicación exclusiva y
supervisión profesional durante todo el período formativo.
La ley también define mecanismos claros de ingreso -por concurso público-, certificación oficial de especialidad, y posibilidad de inserción laboral posterior en el sistema público de salud provincial. Esta estructura legal convierte al modelo misionero en una política de Estado orientada a garantizar la dignidad laboral y la calidad la formación profesional, aun frente a los cambios que a nivel nacional implican una regresión en derechos adquiridos.
Profesionales de la salud marchan en CABA contra la reforma nacional que precariza las residencias
En rechazo a la Resolución 2019/25, profesionales de la salud del sistema nacional de
residencias realizaron una marcha en Plaza de Mayo, en la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, para manifestar su preocupación por la pérdida de derechos laborales que implica la
reforma. Denuncian que la transformación de residencias en becas elimina beneficios
clave como obra social, aportes previsionales jubilatorios y licencias, además de aumentar la carga horaria y reducir la remuneración.
Los trabajadores exigieron la derogación de la resolución y la apertura de un diálogo urgente con las autoridades nacionales, afirmando que la residencia es un trabajo que debe ser reconocido y respetado. Rechazaron la precarización que supone el nuevo esquema, y bajo la consigna “Formación, no precarización” remarcaron que no hay libertad real ni elegir entre opciones que impiden percibir derechos como contrato. Mientras tanto, en provincias como Misiones, donde las residencias están respaldadas por una ley específica, se sostienen condiciones laborales formales y beneficios integrales para los profesionales en formación.