Juan Cruz Vega, uno de los polémicos refuerzos de la era Moretti, se fue de San Lorenzo. Estuvo un año en el club y no llegó a disputar ni un minuto.
El atacante Juan Cruz Vega se marchó de San Lorenzo sin haber jugado ni un solo minuto en la Primera División y cerró un capítulo que estuvo marcado por la polémica desde sus inicios.
El mediocampista de 27 años había llegado al club en agosto de 2024 desde Argentino de Rosario, equipo de la Primera C, sin experiencia previa en el fútbol de élite y en un contexto institucional que levantó más de una ceja entre los socios.
Su incorporación se dio durante la presidencia de Marcelo Moretti —hoy con licencia— y coincidió con el arribo de Maximiliano Zelaya, otro refuerzo que, al igual que Vega, fue objeto de cuestionamientos por su escaso recorrido competitivo.
Vega nunca logró meterse en la consideración de los entrenadores que pasaron por el club desde su llegada, y tampoco fue tenido en cuenta por el actual director técnico, Damián Ayude.
Durante su paso por Boedo, el volante apenas anotó un gol en la división Reserva, frente a Argentinos Juniors. Más allá de ese registro, su presencia nunca se proyectó hacia el primer equipo y terminó por convertirse en un jugador sin incidencia deportiva ni estratégica en el armado profesional.
En las últimas horas, Vega se despidió del plantel y del cuerpo técnico, antes de formalizar su desvinculación de la institución. Su futuro inmediato parece orientado hacia el fútbol peruano, donde el Club Universidad Técnica de Cajamarca ha manifestado interés por sumar sus servicios.