Este lunes 4 de agosto se celebró un nuevo Día del Panadero en Argentina, un rubro que mantiene su tradición y persiste al paso del tiempo, pese al arribo de los avances tecnológicos.
En ese marco, Omar Acosta, propietario de una reconocida cadena de panificados en la ciudad de Posadas, dialogó con Códigos y destacó el esfuerzo por mantener viva la tradición familiar que ha perdurado por más de tres décadas.
Acosta subrayó la importancia de no dejar pasar por alto tantos años de trabajo y dedicación. "Es mucho sacrificio y esfuerzo familiar", expresó, al tiempo que reivindicó el trabajo “noble” de los panaderos, quienes trabajan día y noche “para estar siempre al servicio del cliente”.
Actualmente, Tahona emplea a aproximadamente 60 personas, distribuidas en cinco sucursales ubicadas en la Capital provincial, brindando un servicio de calidad desde hace más de 30 años.
“Este es nuestro oficio, sacrificado, pero lo sabemos hacer y seguiremos en este rubro”, remarcó Acosta, al referirse al complejo contexto económico que atraviesa el país.
El empresario, quien también preside el Centro Industrial de Panaderos, comparó la situación del sector a nivel nacional. Señaló que las dificultades son compartidas entre provincias: “La realidad en Misiones no se diferencia mucho de la de Salta o Buenos Aires. Todos enfrentamos problemas similares, aunque en el interior los costos por fletes, transporte e impuestos son más altos”.
Superar las crisis y formar nuevos profesionales
Acosta se mostró optimista frente a los desafíos actuales del sector, recordando que el rubro atravesó situaciones difíciles como la pandemia y otras crisis económicas a lo largo del tiempo.
“No es la primera ni será la última crisis. Y las hemos superado todas sin despedir gente”, reiteró.
Finalmente, informó que desde el Centro Industrial de Panaderos se impulsará la formación de nuevos trabajadores especializados, con el objetivo de generar mano de obra calificada que abastezca a toda la provincia de Misiones.