martes, junio 17, 2025

Cacho Buenaventura llega a Posadas con su gira por el litoral

La presentación del humorista será el viernes 27 a las 21:30 horas en el auditorio del Montoya.

Cacho Buenaventura Show es el espectáculo de relatos, cuentos y canciones de uno de los humoristas más prestigiosos del país. Los amigos, la vida en el pueblo, su “tata”, su “mama” y la “cansadora” siempre están presentes en un relato que encuentra complicidad con su público. En esta su nueva visita por el litoral tendrá dos paradas, el recorrido comienza el jueves 26 a las 21:30 horas en el complejo cultural Guido Miranda, para luego trasladarse a nuestra capital el viernes 27 a las 21:30 horas en el auditorio del Montoya (Ayacucho 1962). Los ingresos se pueden adquirir en la plataforma NorteTicket.com.

Cacho es un gran contador de historias. Cruzdelejeño y carismático, a los 14 años ya animaba los eventos de su pueblo. Con el paso de los años fue construyendo una inagotable y exitosa carrera artística que lo llevó a recorrer los escenarios más importantes del país. Su sello propio es la picardía y su particular gracias para contar anécdotas cotidianas, simples, que dejan mensajes positivos y carcajadas al mismo tiempo. Es que Cacho invita a su gente a “estar contentos” y a olvidarse por un rato de las preocupaciones cotidianas.

Nacido en Cruz del Eje, Cacho empezó su camino artístico desde muy chico. A los 14 años ya animaba actos escolares y celebraciones populares, y con el tiempo fue construyendo una carrera sólida, basada en la palabra, en la cercanía.  Con su cuerpo, su voz y sus pausas alcanzan para que el público se vea reflejado y, al mismo tiempo, se ría a carcajadas.

Con la gracia de destacar lo absurdo de lo simple, sus presentaciones son una invitación a “estar contentos”, como él mismo suele decir. En tiempos de velocidad y ruido, Cacho se planta en el escenario con otra lógica: la del cuento compartido, la de la charla con café, de las risas compartidas. Una hora y media para aflojar los hombros, reírse de uno mismo y salir del teatro con el alma un poco más liviana.

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