La trágica muerte de Juanita Milagros Sirimarco, de 13 años, quien falleció en Posadas tras regresar de un viaje de egresados a Villa Carlos Paz, generó un fuerte debate sobre la responsabilidad de las instituciones educativas. La familia de la niña denuncia que no recibió asistencia médica a tiempo e iniciaría acciones legales contra la empresa de viajes.
Luis Bogado, director ejecutivo del Servicio Provincial de Enseñanza Privada (SPEPM), se pronunció sobre el caso en Códigos en la Tele y aclaró que los viajes de egresados no están respaldados por el sistema educativo. Se refirió a las posibles sanciones administrativas que podrían enfrentar la institución, docentes y representantes legales involucrados en el trágico hecho.
Según los informes, Juanita presentó síntomas graves durante el viaje, incluyendo diarrea, fiebre alta y presión arterial elevada. El viaje tuvo lugar del 2 al 8 de octubre, y su estado de salud se deterioró notablemente tras su regreso. “Cuando se hicieron públicos estos hechos, el SPEPM comenzó un proceso de auditoría”, comentó Bogado.
El funcionario también expresó su apoyo a la familia de Juanita: “Perder un hijo no es fácil. Nuestra solidaridad es con esa familia”. Y además, indicó que el SPEPM está llevando a cabo una auditoría para esclarecer las circunstancias que rodearon la tragedia. “Estamos convocando a los directivos y autoridades para elaborar un acta sumarial que determine la responsabilidad de cada uno de ellos. Hemos encontrado algunas contradicciones en la información proporcionada por la entidad propietaria del colegio”, agregó.
En esta línea, enfatizó la distinción entre un viaje educativo y uno de egresados. “Los viajes de egresados no están contemplados dentro del sistema educativo ni son avalados por el SPEPM. La responsabilidad recae en las empresas, familias o alumnos que deciden realizarlo”, explicó. Detalló que esto contrasta con los viajes de estudio, que se llevan a cabo dentro del marco del ciclo lectivo y en un proyecto educativo definido.
El director del SPEPM señaló que hubo confusión por parte de las autoridades del colegio, ya que la institución presentó un proyecto firmado por directivos y docentes que autorizaba el viaje de egresados, y que el pedido se realizó vía mail el 1º de octubre, horas antes del viaje.
“Estamos auditando todos estos elementos para determinar la responsabilidad de la representante legal, directivos, rectores y docentes”, comentó Bogado. Las posibles sanciones podrían ir desde un llamado de atención hasta la revocación del servicio educativo.
“Desde el inicio de nuestra gestión, informamos a las entidades propietarias de colegios que los viajes de egresados no estaban contemplados dentro del sistema educativo. La escuela no debe fomentar este tipo de actividades, salvo aquellas con un objetivo pedagógico”, afirmó Bogado.