Un matrimonio de la ciudad austríaca de Linz, a unos 200 kilómetros al oeste de Viena, había comprado ropa por Internet. Lo que millones de personas realizan día a día sin problema casi se convierte en una pesadilla para esta familia. Cuando abrieron las cajas descubrieron que había casi 25.000 pastillas de éxtasis.
Según el relato policial, la pareja aceptó ambos paquetes, que no estaban relacionados entre sí, aunque le sorprendió el peso de uno de ellos.
La mujer creyó en un primer momento que las pastillas eran en realidad piedras decorativas de color rosa, aunque el marido pronto sospechó, “tras una inspección más cercana”, que aquello era algún tipo de droga, informa la agencia de noticias APA.
La pareja, de 58 y 59 años, compró dos prendas de ropa a una página web de Holanda y recibieron después de unos días dos paquetes: uno contenía la ropa que compraron y otro 24.800 pastillas de éxtasis, por un valor en el mercado negro de unos 500.000 euros. Al instante llevaron la caja con la droga a la oficina local de correos, donde avisaron a la policía.
Los agentes austríacos alertaron a las fuerzas de seguridad holandesas, que descubrieron que el paquete en realidad llegó por error a Austria y su destino original era una dirección en Escocia.
A la par, la policía británica detuvo a la persona a la que estaba dirigido el paquete mientras que siguen investigando quién envió la droga desde Holanda.
Fuente: TN