La tasa de desempleo bajó al 6,6% en el tercer trimestre del año, desde el 6,9% registrado en el mismo período de 2024, según los datos difundidos este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). La mejora del indicador se conoció en momentos en que el Congreso debate la reforma laboral impulsada por el oficialismo.
En comparación con el trimestre previo, la desocupación mostró una caída de un punto porcentual, desde el 7,6%, de acuerdo con el informe del Mercado de Trabajo (EPH).
La reducción del desempleo se dio en un contexto de recuperación de la actividad económica, aunque también estuvo acompañada por un aumento de la informalidad laboral, que pasó del 42,6% al 43,3% interanual, y por una contracción del empleo asalariado registrado.
En el tercer trimestre, la tasa de actividad —que mide la población económicamente activa sobre el total— subió al 48,6%, desde el 48,3% de un año atrás, mientras que la tasa de empleo aumentó al 45,4%, frente al 45% del mismo período de 2024.
“La baja del desempleo se produjo por un aumento de las personas ocupadas y no porque la gente haya dejado de buscar trabajo”, explicó Daniel Schteingart, director de Desarrollo Productivo de Fundar, quien destacó que la tasa de empleo pasó del 45% al 45,4%.
En términos absolutos, el INDEC estimó que unas 958.000 personas se encontraban desocupadas, sobre una población económicamente activa de 14,6 millones en los 31 aglomerados urbanos relevados por la Encuesta Permanente de Hogares.
Por su parte, el director ejecutivo de la Fundación Libertad y Progreso, Aldo Abram, atribuyó la mejora del indicador al mejor desempeño de la actividad económica. “La creación de empleo superó nuestras expectativas y, a pesar del aumento de personas que salieron a buscar trabajo, se logró una caída de la desocupación al 6,6%, lo que constituye una buena noticia”, señaló.
