Hubo más movimiento que el año pasado, aunque con estadías más breves y gasto moderado. Los turistas pasaron en promedio dos noches fuera de casa, frente a las 2,4 del año pasado.
El primer fin de semana largo de octubre volvió a mover al país. Según datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), 1.440.000 turistas se desplazaron por distintos destinos nacionales, un 2,1% más que en el mismo feriado de 2024. El sol, la cercanía del verano y el simple deseo de “cortar la rutina” hicieron lo suyo.
Sin embargo, el dato que marcó el pulso del fin de semana fue otro: las estadías se acortaron. Los turistas pasaron en promedio dos noches fuera de casa, frente a las 2,4 del año pasado. Una tendencia que confirma el nuevo mapa del turismo argentino: viajes más cortos, planificados a último momento, pero sin resignar consumo.
“Fue un movimiento muy saludable para las economías regionales, que refleja la capacidad del sector de adaptarse al contexto”, señalaron desde CAME. En total, el gasto turístico alcanzó $262.627 millones, un 16,2% menos en términos reales, pero aún con buen dinamismo en gastronomía, alojamiento y transporte.
Entre los destinos más elegidos, Puerto Iguazú, Córdoba, Termas de Río Hondo, Villa Elisa, Tandil, El Chaltén, Mar del Plata, Mendoza y la Ciudad de Buenos Aires volvieron a liderar los rankings.