Guardaparques provinciales del Grupo de Operaciones en Selva zona Sur y sus pares nacionales del Parque Federal Campo San Juan llevaron adelante un operativo de prevención de delitos ambientales sobre el río Paraná.
El recorrido se extendió desde el arroyo Santa Ana hasta la Cuenca Baja del arroyo Garupá. Durante el procedimiento, detectaron en la costa signos de la actividad de cazadores furtivos y encontraron cuatro redes de distintos tamaños y medidas, 15 esperas y tres de las llamadas “boyas locas”, armadas artesanalmente con bidones y anzuelos.
El grupo de guardaparques del Ministerio de Ecología que trabajó en la recorrida pertenece al Parque Provincial Cañadón de Profundidad y sus colegas nacionales intervinientes están afectados al Campo San Juan y dependen de la Administración de Parques Nacionales.