A pocos días de las elecciones legislativas del domingo 8 de junio, el presidente del Instituto Misionero de Macroeconomía Circular (IMAC), Roque Gervasoni, analizó el resultado electoral que dejó al Frente Renovador NEO con una victoria ajustada. Lo hizo en el marco de otro streaming de Códigos, la política desde adentro. Dejó en claro que, si bien retuvieron la mayoría parlamentaria, “faltó trabajo territorial y más volumen militante”.
Con tono autocrítico, el dirigente renovador sostuvo que la elección se ganó, pero “con lo justo”. “Me hubiese gustado que tengamos un mejor número. Ganamos 1 a 0, pero pidiendo la hora”, comparó. Y reforzó su idea con una advertencia para adentro del espacio: “A algunos candidatos les faltó territorio y militancia. No se puede improvisar un liderazgo en 45 días”.
Desde su lugar en el IMAC y como referente del Frente Renovador, Gervasoni cuestionó la falta de movilización en algunos municipios. “Faltó ir a buscar a la gente que no fue a votar. Me hubiese gustado más trabajo militante”, insistió. Recordó que en elecciones intermedias es habitual cierta relajación política, pero que esta vez “se sintió la plancha”.
Cuestionó a algunos dirigentes y candidatos del propio espacio a quienes definió como “piantavotos”. “Para adentro te dicen ‘vamos con ustedes’, pero afuera te restan. El candidato tiene que caminar, abrazar, escuchar, comerse un reviro con el vecino. Eso es cercanía real, no una selfie”, apuntó.
Al mismo tiempo, valoró el estilo del actual gobernador Hugo Passalacqua, a quien reconoció como conductor cercano al pueblo. “Nos dijo: ‘gurisada a amarrarse’, nada de oficina, a caminar el territorio”, recordó.
El voto enojo y la sombra de Milei
Al analizar el resultado, Gervasoni interpretó que el malestar económico nacional influyó directamente en la elección provincial. “El problema es la heladera, el enojo con el ajuste brutal de Milei. Pero la bronca nos la tiran a nosotros, cuando lo votaron ellos”, argumentó.
El dirigente fue especialmente crítico con sectores que canalizaron ese malestar a través de candidaturas de La Libertad Avanza, y otras propuestas como la de Ramón Amarilla. “No hizo nada por los policías, ni por los docentes, ni por nadie. Pero lo victimizamos y metió tres o cuatro bancas”, lamentó.
Para Gervasoni, el electorado expresó su enojo ante la pérdida del poder adquisitivo y los aumentos generalizados: “Lo de la motosierra tiene un límite. La inflación y la pérdida del salario real son una bomba social que ya está golpeando, y nosotros estamos conteniendo con recursos provinciales”, señaló.
El fallo contra Cristina y el futuro del peronismo
En medio del análisis local, Gervasoni se permitió mirar hacia la política nacional, particularmente tras la decisión judicial que sacudió al peronismo esta semana. Este martes, la Corte Suprema de Justicia ratificó la condena a Cristina Fernández de Kirchner a 6 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, en la causa Vialidad. Un fallo histórico que, además de cerrar una etapa judicial, dinamita cualquier posibilidad de regreso electoral de la expresidenta.
“Podrá apelar a cortes internacionales, sí, pero la condena la tiene que cumplir. Ya está. Tiene que ocupar otro rol, como armadora, como conductora. Pero su imagen negativa es muy alta”, sostuvo Gervasoni, aunque reconoció su capacidad política. “Por lejos, es uno de los mejores cuadros del país”, aclaró.
En ese sentido, consideró que el fallo logró algo que ni el PJ había conseguido: unir a los distintos sectores del peronismo. “Hasta ahora tenías a Massa por un lado, Kicillof por otro, Cristina por otro. Hoy, por el fallo, están todos juntos. Como el 17 de octubre de 1945”, comparó.
Además, apuntó que el aparato judicial “logró lo que no pudieron los dirigentes del peronismo”, al generar una reacción unificada que hoy vuelve a mostrar al kirchnerismo en pie de lucha. “Es el efecto rebote del odio”, sintetizó.
Voto castigo, juventud y el rol de la Renovación
El dirigente también expresó su incomodidad con lo ocurrido en municipios como San Vicente, donde el Frente Renovador perdió. “Gobernar es para todos, no solo para quienes tributan. Hay que volver a hablar con la gente de la chacra, del campo, del barrio. No se puede gobernar desde la rotonda”, afirmó con tono autocrítico.
Sobre la renovación de cuadros políticos, dejó en claro su posición: “Lo viejo funciona, y lo nuevo también, pero si va de la mano con lo viejo”. Apoyó a jóvenes dirigentes, pero recalcó que deben ganarse el lugar.
Cerró con un mensaje claro para el espacio: “Hay que volver a embarrarse, seguir caminando, rearmar la estructura. Somos renovadores. No prometemos motosierra, ni hospitales arancelados, ni educación privada. Prometemos gestión, cercanía y soluciones concretas”.
“Seguimos trabajando”, repitió. “Esto no es una pausa. La elección se ganó, sí, pero con señales. Hay que interpretarlas rápido”, finalizó Gervasoni.