A partir de esta semana, las escuelas de la provincia cuentan con la fuerza que provee una norma y reconoce esta actividad como herramienta de educación ambiental sustentable.
El Programa Provincial de Huertas Escolares surgió como respuesta a la necesidad de las instituciones que proponían esta temática como recurso didáctico de aprendizaje. A partir de esta semana, las escuelas de la provincia de Misiones, cuentan con la fuerza que provee una ley y reconoce esta actividad como herramienta de educación ambiental sustentable.
El objetivo es que las huertas orgánicas sean utilizadas como un “recurso pedagógico”; para ello todas las escuelas misioneras deberán tener su huerta, sean públicas o privadas, rurales o urbanas, de educación primaria o secundaria.
Entre otras actividades, implementarán talleres de horticultura para generar conciencia ambiental, promover la agricultura familiar, enseñar el derecho a la soberanía alimentaria y promover la educación económica a través de la agricultura.
También, se establece que las escuelas tendrán que programar salidas recreativas a ferias francas y a huertas locales; y realizar capacitaciones a los referentes de las huertas escolares.
Desde la secretaría de Estado de Agricultura Familiar y el ministerio de Educación de Misiones, trabajarán de manera conjunta para implementar huertas escolares orgánicas, jardinería, vivero de árboles, parque botánico y otras modalidades, que posibiliten múltiples experiencias acerca del entorno natural y rural donde estén insertos las escuelas, colegios e institutos.
La secretaria de Agricultura de la provincia, Marta Ferreira, expresó a los medios locales que “Misiones adopta un modelo de desarrollo productivo, entonces todas las instituciones tenemos que trabajar en ese sentido y la educativa es fundamental porque es la formadora de los agricultores del mañana”.
Además, Ferreira agregó que la “huerta escolar es un excelente recurso para convertir los centros educativos en lugares que posibiliten a los alumnos múltiples experiencias acerca de su entorno natural y rural, entender las relaciones y dependencias que tenemos con él, y poner en práctica actitudes y hábitos de cuidado y responsabilidad medioambiental”.
