El Parque Nacional Iguazú cierra el año con un récord de visitantes recibidos, precisamente alrededor de 1.600.000 de personas ingresadas durante el año 2019. A la vez, se vaticina un buen verano 2020.
“Tenemos muy buenas expectativas para los meses de enero y febrero, basados en las reservas anticipadas según nos informan los distintos establecimientos hoteleros”, explicó Leopoldo Lucas, presidente del Ente Municipal Turismo de Iguazú (ITUREM).
“Estamos muy contentos porque Iguazú es un destino que logra reunir a los distintos públicos, está al alcance de todos los bolsillos y además seguimos incorporando atracciones, nuevos circuitos, por lo que ya tres días no alcanzan para disfrutarlo a pleno, ya se necesitan mínimo cinco días en nuestro lugar. La conectividad aérea no permite estar más cerca de muchos lugares del país y del exterior con el nuevo vuelo que une Madrid con nuestro destino”, agregó.
Jungle Fly, la novedad
En el mes de Setiembre se inauguró en Puerto Iguazú una nueva atracción. Se trata de Jungle Fly, una experiencia para que los turistas pueden vivir el destino desde el lado de la Selva.
“Es un circuito de aventuras diseñado en el corazón de la selva misionera, a casi 20 minutos de la ciudad, en donde quienes nos visitan pueden vivir por sus propios medios distintas estaciones que le permitirán mirar la naturaleza desde otra óptica y conociendo más el entorno natural en el que vivimos”, relató Patricia Durán creadora del emprendimiento.
Jungle Fly se desarrolla en un área protegida de 20 hectáreas en un predio privado, con actividades de tirolesa (300 metros de largo a 70 metros de alto), arborismo (traslado sobre puentes colgantes), y tirolina de 100 metros, un descenso de rappel en una cascada, y finaliza con un trekking en medio de la selva sobre un barranco.
AF.