El jefe del Ejército iraní asegura que la situación en Oriente Medio y en el resto del mundo requiere que las fuerzas de su país estén más preparadas que nunca.
Irán no es un país agresor, pero tiene el poder de defenderse y de lanzar contraataques “destructivos” si alguna vez lo atacan, ha advertido este 14 de julio el jefe del Ejército de Irán, el general mayor Abdolrahim Mousaví.
Al dirigirse a sus tropas en la ciudad iraní de Tabriz, ese alto mando militar ha recalcado que su país “nunca ha iniciado ninguna guerra ni lo hará”, pero tampoco se basa “únicamente en la defensa”.
De hecho, Mousaví estima que la situación en Oriente Medio y en el resto del mundo requiere que las fuerzas iraníes estén más preparadas que nunca.
Un poder ofensivo “devastador”
Aunque “en una primera etapa” Irán se defendería, este hombre asegura que su “poder ofensivo” y su capacidad para contraatacar “sería devastadora” y “haría que los enemigos se arrepientan”.
El jefe del Ejército iraní también ha recordado que Teherán ya demostró su capacidad para defenderse de sus agresores en la guerra que libró contra el Irak de Saddam Hussein en los años 80.
Hoy en día, Irán es “mucho más poderosa” en la defensa de sus valores y su nación y “nunca dará un paso atrás” para protegerse, aseveró Abdolrahim Mousaví.
- En las últimas semanas, se han intensificado las tensiones entre Washington y Teherán, después de que Irán derribara un dron estadounidense RQ-4 Global Hawk en aguas del estrecho de Ormuz el pasado 19 de junio. Las autoridades iraníes aseguran que esa aeronave de vigilancia estaba su espacio aéreo cuando la derribaron, pero los estadounidenses consideran que fue “un ataque no provocado”.
- Este mes también surgieron roces entre Londres y Teherán, debido a que infantes de la Marina británica y miembros de la Policía de Gibraltar interceptaron el buque cisterna iraní Grace 1 el pasado 4 de julio.