Netanyahu formó un gabinete de guerra y un “gobierno de emergencia” tras un acuerdo con líderes de la oposición. El primer ministro prometió “aplastar” a Hamas.
El Ejército israelí intensificó los bombardeos en la asediada Franja de Gaza y milicianos palestinos lanzaron más cohetes desde el enclave hacia Israel, donde el primer ministro Benjamin Netanyahu y un líder de la oposición acordaron formar un “gobierno de emergencia” y un gabinete de guerra para dirigir la respuesta a los ataques sin precedentes de Hamas. La organización terrorista palestina dijo haber liberado a una rehén israelí y a sus dos hijos, pero el Ejército hebreo no lo confirmó.
“Aplastar” a Hamas
El nuevo gabinete de guerra israelí, que se centrará sólo en cuestiones relativas a la respuesta armada a los ataques del grupo islamista palestino y que durará hasta que ésta termine, estará formado por Netanyahu, el opositor Benny Gantz y el ministro de Defensa, Yoav Gallant. El principal líder opositor, Yair Lapid, no forma parte de la alianza aunque el comunicado oficial precisó que tiene reservado un puesto en el gabinete.
El resto del gobierno de coalición de Netanyahu, un conjunto de partidos nacionalistas de extrema derecha y judíos ultraortodoxos, seguirá en sus puestos encargado de los asuntos cotidianos que no estén vinculados a la respuesta militar. Se espera que el conflicto entre Tel Aviv y Hamas escale aún más, en medio de especulaciones de que Israel se prepara a lanzar una ofensiva terrestre contra la Franja de Gaza.
En ese sentido Netanyahu prometió el miércoles “aplastar” a Hamas y afirmó que cualquier miembro del movimiento islamista palestino podía considerarse “hombre muerto”. El primer ministro israelí denunció que la organización “decapitó gente, violó a mujeres y quemó vivas a personas”, según el diario Times of Israel. Gantz consideró que era un momento para unirse mientras el país enfrenta “una de sus horas más difíciles”.
Violencia sin fin
Israel movilizó a 360 mil reservistas y el gobierno se encuentra bajo una intensa presión pública para derrocar a Hamas, que gobierna el territorio desde 2007 y mantuvo firmemente el control durante cuatro ofensivas israelíes previas. El miércoles por la madrugada al menos 30 personas fallecieron en el enclave en cientos de bombardeos israelíes que afectaron edificios de viviendas, fábricas, mezquitas y tiendas, según Hamas.
Los aviones de combate israelíes bombardearon también la Universidad Islámica, vinculada a Hamas, y derribaron varios edificios. Al menos 11 trabajadores de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) murieron en los últimos cuatro días por los bombardeos de Israel sobre Gaza. Entre los muertos se encuentran cinco profesores de la UNRWA, un ginecólogo, un ingeniero, un consejero psicológico y tres miembros de apoyo, de acuerdo con un comunicado de la agencia de la ONU.
Este miércoles seis personas resultaron heridas por una andanada de cohetes lanzada contra la ciudad costera israelí de Ascalón, al norte de Gaza, que fue reivindicada por Hamas y por el grupo palestino Yihad Islámica. Un cohete impactó en un hospital de la ciudad pero no causó víctimas. Más cohetes fueron lanzados desde Gaza la zona de Tel Aviv, pero sin causar víctimas.
En el norte de Israel Hezbollah disparó misiles antitanque contra una posición militar israelí y afirmó haber matado y herido a tropas. El Ejército israelí confirmó el ataque pero no hizo comentarios sobre posibles víctimas, mientras que bombardeó luego la zona del sur del Líbano donde se lanzó el ataque. La Agencia Nacional de Noticias del Líbano dijo más tarde que tres civiles resultaron heridos y 10 casas destruidas por los bombardeos en los poblados de Marwaheen y Duhaira.
Anuncio de liberación de rehenes
El brazo armado de Hamas dijo este miércoles que habría liberado a una rehén israelí y a sus dos hijos, capturados en la ofensiva lanzada el sábado contra Israel. Un video difundido por Al-Aqsa TV, el canal de Hamas, muestra a una mujer con camisa azul junto a dos niños y tres hombres armados alejándose de un alambre de púas que parece ser la valla levantada por Israel alrededor de la Franja.
La prensa palestina indicó que se trataba de Avital Aladjem, del kibutz Holit, que había sido llevada por la fuerza el sábado por hombres de Hamas junto a sus hijos a la zona fronteriza entre Israel y la Franja de Gaza luego del asalto del sábado. Pero la televisión pública israelí sostiene que las imágenes muestran a personas que “nunca habían sido llevadas a Gaza”.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, negocia con Hamas la liberación de los rehenes israelíes. El grupo islamista amenazó con ejecutarlos sin previo aviso en caso de que continúen los bombardeos a Gaza. La ofensiva de Hamas tomó a Israel por sorpresa aunque, según el congresista estadounidense Michael McCaul, jefe del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, Egipto alertó a los israelíes “tres días” antes del ataque. Egipto no comentó oficialmente esta información, que fue publicada en la prensa hace varios días.
Los aliados de Israel piden mesura
El secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abulgueit, calificó de “masacre” los intensos bombardeos israelíes contra la Franja de Gaza durante una reunión extraordinaria a nivel de ministros de Exteriores. Mientras tanto el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró este miércoles que Israel tiene “derecho a defenderse” del ataque de Hamas, pero pidió que su respuesta sea “proporcionada” y haga lo posible por evitar la muerte de civiles.
Por su parte el presidente estadounidense Joe Biden anunció que conversó con Netanyahu y le instó a seguir las “normas de la guerra” en su respuesta a Hamas. “Lo único que le dije es que es realmente importante que Israel, con toda la ira y frustración que existe, opere bajo las normas de la guerra”, manifestó Biden. Pero la ministra de Inteligencia israelí, Gila Gamliel, declaró que el gobierno estaba determinado a “erradicar” a Hamas para que “nadie en el mundo tenga siquiera la idea de usar lo ocurrido (en Israel) como un modelo” para futuros atentados.
El Consejo de Seguridad de la ONU volverá a reunirse este viernes para tratar la escalada en el conflicto entre Israel y Palestina. Las muertes de civiles y un posible contagio en la región fueron las dos prioridades en las que se centró el Consejo, luego de una primera reunión de emergencia a puertas cerradas el domingo pasado, en la que no hubo una condena unánime de los ataques de Hamas a Israel.
En la Franja de Gaza el ministerio de Salud del gobierno de Hamas dijo que 1.100 palestinos, en su mayoría civiles, murieron en los bombardeos de Israel y que 5.300 resultaron heridos. En Israel el Ejército elevó a más de 1.200 la cifra de muertos en los ataques de Hamas, entre ellos 169 soldados. La cartera sanitaria cifró los heridos en 3.007, entre ellos 28 en estado crítico y otros 354 con lesiones graves.
