Este sábado 3 de octubre, en medio del contexto de pandemia, la Escuela Municipal de Danzas celebra sus 61 años. Este año el festejo será diferente, no habrá Gala de homenaje ni puesta en escena de los bailarines debido a la imposibilidad de realizar actividades en espacios cerrados o al aire libre con conglomerados de gente. Es por eso, que el festejo se hará de manera virtual con saludos a través de las redes sociales de la Institución.
Actualmente, las actividades se realizan en modalidad virtual y se dictan por la tarde a partir de las 15 hasta las 20 hs. Sobre esta nueva modalidad que la pandemia obligó a adoptar, la directora de la Escuela Municipal Laura Romero consideró que si bien “nos obligó a reacomodarnos, también nos hizo valorar la presencia de los docentes en las aulas”.
Durante estos 61 años, la escuela se ha convertido en el motor que mantiene viva la cultura y la tradición, por ese motivo, Romero resaltó que “es fundamental reconocer la trayectoria de la escuela que fue una de las primeras escuelas de Danzas que hubo en la provincia”. En ese sentido también consideró que en este aniversario “es necesario reconocer el trabajo que realizan las diferentes personas que forman parte de la institución que con su dedicación y esmero motivan a niños, adolescentes y adultos a aprender sobre el arte y la cultura”.
Un poco de historia
La Escuela Municipal de Danzas arrancó sus actividades el 12 de abril de 1959 como un taller dedicado a la enseñanza de danzas folclóricas para hijos de empleados municipales. Su primera docente fue la profesora Nora Urdinola, quien más adelante fue sucedida por María Luisa Alonso de Zambrano.
La sede inicial del establecimiento fue el Salón Mayor del Palacio del Mate, luego se fue trasladando por otros espacios como el subsuelo del Anfiteatro Manuel Antonio Ramírez, la Guardería Municipal Emilio Gottschalk y el Centro Comunitario de Villa Cabello.
Paralelamente, en 1978 se creó la “Escuela Municipal de Danzas Clásicas y Contemporáneas” dirigida por la maestra Laura de Aira.
Fue en 1991 cuando ambas instituciones se unificaron y en 1994 pasaron a funcionar como “Escuela Municipal de Danzas María Luisa Alonso de Zambrano” destinada a instruir en los estilos clásico y folclore.
Finalmente, recién en 1999 el instituto de danzas más antiguo de Posadas se estableció en El Paseo Cultural La Terminal, lugar en el que sigue estando hasta la actualidad.
