El proyecto de ley pretende que se otorgue una contraprestación económica a los profesionales de la salud que compense la caída de su facturación.
El diputado nacional radical Martin Berhongaray presentó un proyecto de ley para que las obras sociales y entidades de medicina prepaga otorguen una contraprestación económica a los profesionales de la salud que compense la caída de su facturación, ya que no pueden prestar servicios por las restricciones por el coronavirus.
El legislador dijo que “dentro de los efectos negativos desencadenados por el covid-19, se inscribe el impacto económico absorbido por la sanidad privada, que responde fundamentalmente a la suspensión masiva de consultas de carácter preventivo, reprogramación de intervenciones quirúrgicas, postergación de análisis clínicos y prácticas médicas tanto privadas como concertadas, entre otros factores de incidencia”.
El proyecto fija que esa “contraprestación será equivalente al valor económico que represente la cantidad del promedio histórico prestacional mensual correspondiente a los últimos seis meses”.
Berhongaray dijo que para “la cuantificación definitiva” se deberá ponderar la “atención de carácter preventivo y seguimiento de enfermedades crónicas”, donde “se establece un reconocimiento equivalente al 50 % del PHPM de las consultas” de ese período.
Agregó que la iniciativa “se inspiró en la modalidad recientemente acordada entre la obra social de la provincia de La Pampa SEMPRE y los profesionales médicos” por la cual “se resolvió asegurar a cada médico un 70% del valor histórico de cada prestador computando en base al promedio de los últimos 6 meses”.
T.