Los equipos del Ministerio de Capital Humano, Trabajo y Desregulación buscan cerrar este fin de semana largo el proyecto de reforma laboral para que el martes quede a disposición del presidente Javier Milei y pueda ingresar a sesiones extraordinarias (10 al 30 de diciembre). Aunque circuló un borrador, aún restan definir puntos sensibles —como el costo para empleadores del blanqueo laboral—, pero gran parte del articulado ya está avanzado.
El sector empresario sigue el tema de cerca y reclama precisiones. Algunas cámaras consultaron abogados laboralistas ante posibles conflictos con el sindicalismo, en un contexto delicado para las pymes, con suspensiones, caídas de actividad y temor a más tensiones. Desde FECOBA piden incluir formación profesional, mientras que la UNEPP sostiene que una reforma profunda podría generar empleo y aliviar cargas legales y burocráticas.
Entre las medidas que trascendieron se evalúan:
- relación salario-productividad con posibilidad de bonos e incentivos;
- creación de un Fondo de Asistencia Laboral con aporte empresarial del 3%;
- pago parcial del sueldo en especie o en dólares;
- mayor flexibilidad horaria para ajustar jornadas según producción;
- vacaciones fraccionadas en tramos de 7 días, con un período de verano garantizado cada tres años.