El diputado provincial y ex presidente del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), Juan José Szychowski, presentó una novedosa iniciativa para transformar al café en una nueva matriz productiva de Misiones.
En diálogo con el streaming de Códigos, la política desde adentro analizó el potencial agroindustrial de la provincia en un escenario global de cambio climático, defendió el rol estratégico del INYM frente a los intentos de desregulación del sector yerbatero por parte de Nación y fue crítico con las políticas económicas del Gobierno nacional.
Polo cafetero en la tierra colorada
Szychowski impulsa el programa de Promoción del Cultivo y Comercialización del Café, una propuesta que busca declarar de interés provincial a toda la cadena cafetera: desde la plantación hasta la venta del producto final. El objetivo es diversificar la economía rural, generar empleo y agregar valor en origen, aprovechando las condiciones agroecológicas que ofrece el territorio misionero.
“En la década del ‘60 y ‘70 en Campo Grande se plantaron casi 500 hectáreas de café, con una industria municipal que funcionó durante muchos años. Luego se dejó de producir, pero hoy con el cambio climático hay una gran oportunidad: las zonas productivas tradicionales están migrando hacia el sur y Misiones tiene el clima y el suelo ideales”, explicó el legislador.
El proyecto contempla asistencia técnica, subsidios, créditos específicos, beneficios fiscales y la creación de un Fondo de Desarrollo Cafetero, así como un Registro Provincial de Productores de Café. La estrategia apunta a conformar cuencas regionales de entre 40 y 50 productores, cada uno con una o dos hectáreas, que se organicen en cooperativas o clústeres para desarrollar sus propias marcas.
Según detalló Szychowski, el café arábico -de especialidad y mayor valor comercial- será el principal foco, a diferencia del modelo brasileño basado en volumen con la variedad robusta. “Nosotros no podemos competir en cantidad, pero sí en calidad. Hay que apuntar a un café premium, producido en pequeñas parcelas y envasado en la provincia. Que cada productor pueda tener su marca, como ocurre con la yerba”, sostuvo.
Proceso y prueba piloto
El proceso industrial es relativamente accesible y el objetivo es que el valor agregado quede en Misiones. “Desde la cosecha manual del fruto maduro, al secado y envasado, todo puede hacerse acá. El café tarda entre 3 y 4 años en dar frutos, como la yerba, pero su industrialización es mucho más sencilla”, contó.
Ya se realizaron pruebas piloto en distintas zonas, como El Soberbio, donde existen ocho hectáreas plantadas. También se analizan variedades de Brasil y Colombia y se identificaron áreas propicias en la provincia: San Ignacio, Roca, El Soberbio, Andresito, y la franja entre Aristóbulo del Valle y Campo Grande. “A medida que se acentúe el cambio climático, más zonas serán aptas. Tenemos que hacer este desarrollo de forma ordenada”, indicó.
Defensa del INYM
Otro de los ejes abordados por el diputado en la entrevista con Códigos fue la situación del Instituto Nacional de la Yerba Mate. Szychowski fue contundente al rechazar los intentos de disolución del organismo por parte del Gobierno de Javier Milei y recordó que su creación fue una respuesta a la crisis de los años ‘90, cuando la desregulación del sector llevó a la ruina a miles de productores.
“La actividad yerbatera, con aciertos y errores, se recuperó con el INYM. Se logró buen precio al productor, crecieron las ventas y las exportaciones. Y ahora quieren volver a liberar todo como en los ‘90. Esto ya lo vivimos y sabemos cómo termina”, advirtió.
El legislador apuntó contra los grandes molinos que buscan pagar lo menos posible por la hoja verde. Señaló que, en un mercado concentrado, con más de 13 mil productores y apenas cinco o seis grandes compradoras, se necesita la intervención del Estado para equilibrar las reglas del juego.
Mencionó especialmente el proyecto presentado por la diputada nacional correntina Ingrid Jetter Brambilla para eliminar el INYM, al que vinculó con intereses industriales de la zona de Virasoro. “El precio al productor está en 260 pesos, mientras que el paquete en góndola no para de subir. Lo que buscan es enriquecer a unos pocos a costa de fundir a los pequeños. Es gravísimo”, remarcó.
“El sector yerbatero vive una crisis profunda”
Szychowski describió el presente del sector yerbatero como “una crisis profunda” provocada por la desregulación impulsada desde el Gobierno Nacional. Reprochó que se hayan desoído las advertencias de quienes conocen la dinámica del sector y sostuvo que hoy se ven las consecuencias: caída del precio de la hoja verde, productores en quiebra, secaderos paralizados y cosecheros sin ingresos.
“El ministro Sturzenegger nos dijo muchas veces que, si no había precio máximo, los molinos iban a pagar más. Ahora lo liberaron, los molinos subieron el precio en góndola y al productor le pagan cada vez menos. El Estado tiene que intervenir en una economía imperfecta como esta”, afirmó.
Consideró además que la estrategia oficial es funcional a un modelo que expulsa a los productores y concentra la tierra en pocas manos. “El verso de la libertad esconde un negocio para unos pocos”, sostuvo.
Críticas a Milei
El diputado también cuestionó duramente al presidente Javier Milei y a su equipo económico. Recordó que advirtió durante la campaña sobre las consecuencias de un eventual triunfo del actual oficialismo y consideró que hoy muchos productores que celebraron aquel resultado comienzan a entender el error.
“Milei ganó en muchas chacras. Recuerdo tractores con banderas festejando. Dos años después, están escrachando a su hermana Karina en Oberá. Se están dando cuenta de que este modelo va contra ellos”, planteó.
En su visión, el ajuste impacta directamente sobre los sectores productivos, los trabajadores rurales y los consumidores. “No hay un sueldo que alcance. Todo sube: combustible, electricidad, alimentos. Y en cada rubro hay cuatro o cinco que se están quedando con toda la renta”, afirmó.