El presidente estadounidense, Donald Trump, fijó un plazo de “tres o cuatro días” para que Hamas responda a su plan de paz para Gaza, que exige el desarme completo del grupo, la liberación de rehenes y su exclusión de futuros roles de gobierno.
"Vamos a darles alrededor de tres o cuatro días", respondió Trump a un grupo de periodistas al ser consultado por los plazos. "Hamas aceptará o no. Y si no aceptan, esto tendrá un final triste", agregó.
Trump endureció luego su mensaje al advertir que, en caso de un rechazo, Hamas “lo pagará con el infierno”. La propuesta, elaborada junto al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, cuenta con el aval de varias capitales árabes y europeas, según el propio mandatario. “Espero que firmen por su propio bien”, agregó Trump al hablar ante la cúpula militar en Virginia.
Desde Gaza, Hamas abrió un proceso de consultas internas para responder al ultimátum. Voceros en Qatar aseguraron que la organización estudia “responsablemente” el plan y, de acuerdo con fuentes palestinas, se inclinaría a aceptarlo. Según trascendió, el movimiento busca garantías sobre el calendario de retirada israelí, la protección de sus dirigentes en el exterior y el compromiso de que la guerra no se reanude tras la liberación de rehenes.
El plan generó tensiones en Israel. El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, lo calificó como “un fracaso diplomático estrepitoso” y advirtió que desconoce las lecciones del ataque del 7 de octubre de 2023.