En Villa María, Oberá Tenis Club venció a Ameghino por 80-79, en otros de los partidos de la Fase Nacional en la Liga Argentina de Básquetbol.
Arrancó mucho mejor OTC, que con un triple de Gómez Quinteros y un doble de Fabio, tras la apertura de dos de Abeiro, se ponía 5-2 en el inicio. El celeste era muy efectivo en sus pases y en el ataque al aro. El goleo estuvo repartido en el obereño, pero lo tuvo al frente a Hooper. Ameghino buscaba acercarse en el marcador con tiros externos, con Marshall y Aristimuño como los más insistentes. El local apareció con los cambios que introdujo el entrenador, pero diferencia seguía siendo muy favorable para el conjunto misionero. OTC cerró el primer parcial en ventaja: 25-17.
Ameghino intentó plantarse con intensidad en el arranque del segundo periodo, pero no supo ser claro a la hora de definir, y erró algunos puntos casi hechos. OTC apostó a la defensa y las salidas rápidas con transiciones cortas, pero poca efectividad. Los reingresos de Martin y Fabio le dieron otro peso en la ofensiva celeste, que derivó en la levantada de Hooper. Las falencias del conjunto de Kuperman pasaban por el ámbito defensivo, donde el local pudo descontar con tiro desde la pintura. Los llamativo fue que ambos tuvieron muchas pérdidas, lo que beneficiaba al rival en materia defensiva, pero la efectividad estuvo un poco mejor en el local. En el minutos previo al medio tiempo, el local elevó su perfomance y llegó a cercarse a cinco puntos (36-41) cuando faltaban 9.2 segundos, lo que obligó a Kuperman a pedir minuto para rearmar la defensiva y poder marcharse a los vestuarios en ventaja. Schoppler recibió una falta y pudo sumar un simple para que OTC gane al final del primer tiempo por 41-36.
El retorno de los vestuario fue arrollador para el celeste, que en más de tres minutos sacó un parcial de 10-4 (51-38). Pero ese comienzo casi perfecto se vio tibiamente opacado por los errores defensivos, donde los jugadores celestes se cargaron de faltas y le dieron la chance al local de ponerse en juego. Mas, cuando parecía el celeste podría tener complicaciones, apareció Gómez Quinteros con su velocidad en el ataque y a la hora recuperar el balón, lo que le dio oportunidad de puntos a Hooper y Schoppler. Rupil y Aristimuño le dieron mayor peso al local, que intentó achicar diferencias en los últimos minutos. Aunque las pérdidas de equipo rojo le dieron dos puntos desde la línea a Ramírez Acevedo y una bandeja a Schoppler, para que el equipo de la tierra colorada termine el penúltimo cuarto con diez de ventaja: 64-54.
El periodo final arrancó como mate amargo para el celeste. No solo se vio abierta la defensa visitante, sino que el local salió con todo y con Aristimuno como bandera, el equipo villamariense achicó las diferencias y se puso a tres (63-66), cuando restaban 7’33” por jugarse. Al reanudarse el juego, tras el minuto muerto de Kuperman, Rupil logró anotar de dos y recibió la falta, que el ex OTC convirtió en punto bonus para poner la paridad en el marcador (66-66).
Difícil es de explicar lo que le pasaba a OTC, que de haber tenido una diferencia de diez puntos para jugar la última decena de minutos, pasó a perder el partido por uno en los últimos seis minutos. Thygesen fue clave en el ataque del local, que no solo sumaba puntos, sino que también lograba sacar faltas para sumar desde la línea de libres. El juego del celeste era un desconcierto.
La noche era negra para el celeste, pero un triple de Gornatti puso al frente a la visita, con 1’54” por jugar (75-73). Rupil volvió a aparecer con un triple (76-75), pero Martin no tardo en contestar y metió su bomba para que el celeste entre el último minuto en ventaja (78-76).
OTC cometió un error en el ataque a 40 segundos del final, donde consumió los 24” y no tiró al aro. Esto le salió caro, ya que en la continuidad de acciones, Aristimuño clavó una bomba desde el perímetro, de frente al aro, para que Ameghino pase al frente en el tanteador (79-78), y restaban 20.1” por jugarse.
Los dirigidos por Kuperman no encontraban el camino ofensivo al aro, y tuvieron la suerte de que Abeiro fouleara a Ramírez Acevedo, cuando faltaban solo 4.1”. Y desde la línea de libre, Jerónimo anotó los dos y el obereño ganaba 80-79 y solo quedaban unos granos de arena para el final. Para fortuna de Kuperman y compañía, la ofensiva del local fue equivocada, lo que le dio el triunfo al visitante.