Cumbre de mandatarios del NOA y NEA, por primera vez durante la gestión del presidente Milei. El Ministro del Interior irá acompañado por funcionarios de confianza de Caputo, titular de Economía.
Los diez gobernadores que integran el Norte Grande se reunirán este martes en Salta, la primera cita en la gestión del presidente Javier Milei, luego de varios meses de silencio y en un escenario diferente a cuando sus pronunciamientos marcaban agenda.
Ahora, el foco será las nuevas políticas nacionales que terminaron con los fondos para obras públicas, educación, asistencia social, turismo e impulso a actividades productivas, por lo que se prevé que ese será el telón de fondo del encuentro. Quien escuchará las demandas de los jefes provinciales y estará en el cónclave será el ministro del Interior de la Nación, Guillermo Francos.
En esta ocasión, las deliberaciones se realizarán sin las voces de los exjefes provinciales Juan Manzur, de Tucumán, y Jorge Capitanich, de Chaco, que tenían un fuerte predicamento entre sus pares y se espera que surja del espacio algún pronunciamiento sobre la motosierra mileista, sabiendo que la Casa Rosada necesita de su apoyo en el Congreso para cuando se trate en Diputados el mega DNU, ya rechazado en el Senado, y se debate la nueva ley ómnibus. Es posible que la presencia de Francos morigere el tono de los reclamos, aunque algunos mandatarios han tenido en los últimos días fuertes definiciones en contra de plan económico que empuja Balcarce 50.
El encuentro estará presidido por el santiagueño Gerardo Zamora, quien oficia de presidente pro tempore del espacio que está integrado por el salteño Sáenz, Raúl Jalil, de Catamarca; Gustavo Valdés, de Corrientes; Gildo Insfrán, de Formosa; Ricardo Quintela, de La Rioja; Osvaldo Jaldo, de Tucumán, y los debutantes Leandro Zdero, de Chaco; Carlos Sadir, de Jujuy; y Hugo Passalacqua, de Misiones. Jaldo, exvicegobernador, ya estuvo en cumbres anteriores cuando reemplazó al exgobernador Manzur, quien fue jefe de Gabinete de la Nación durante la gestión del expresidente Alberto Fernández. Zdero, de Juntos por el Cambio (JxC), venció en primera vuelta a Capitanich el año pasado, que iba por la reelección; mientras que el radical Sadir sucedió a Gerardo Morales, de quien fue su ministro de Economía.
De acuerdo a lo que se dejó trascender desde la Casa de Gobierno salteña, el temario que analizarán los gobernadores incluye tratar la poda del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), los subsidios al transporte público y a la energía, la situación de las obras públicas nacionales y de los corredores bioceánicos, más los proyectos de infraestructura. Energía solar, la reversión Gasoducto Norte y gasoducto Norte-Norte, la vigencia del Programa Incluir Salud (medicamentos oncológicos, HIV, trasplantes y diálisis) y las deudas del Consenso Fiscal 2023.
Antecedente
Hace poco más de un mes, el 20 de febrero, Francos ya estuvo en suelo salteño en una minicumbre de cinco gobernadores que armó Sáenz -su anfitrión esperaba una mayor asistencia- bajo la excusa de invitar a sus pares a los festejos del Día de la Batalla de Salta.
Sólo estuvieron Jaldo, Jalil, Sadir y Passalacqua. Lo inesperado de entonces fue que la vicepresidenta Victoria Villarruel se anticipó en dos días a Francos, por lo que fue ella la que protagonizó el primer encuentro entre las partes, tras el fracaso en el Congreso de la ley ómnibus, por el que el presidente Milei trató a algunos jefes provinciales de “traidores”. La reunión con el Ministro del Interior sirvió solo para acercar posiciones porque no hubo nada de contante y sonante para las provincias.
Mientras en los últimos días Jalil y Jaldo renovaron sus llamados públicos a dialogar, aunque este último actúa con mayor sintonía con la Casa Rosada, Sáenz estuvo la semana pasada en el despacho del ministro de Economía, Luis Caputo, a quien le solicitó, de acuerdo a la comunicación oficial, “más obras de infraestructura”.
Se especula que de ese encuentro surgió la visita de Francos a Salta y que viaje acompañado por José Rolandi, vicejefe de Gabinete de la Nación, y Carlos Guberman, secretario de Hacienda, ambos de estrecha confianza de Caputo.