La Municipalidad de Posadas impulsa una gran iniciativa en el Hospital Pediátrico Dr. Fernando Barreyro, donde la terapia asistida con animales se convierte en un recurso vital para el bienestar de los pacientes más jóvenes.
Se llevó a cabo una nueva jornada de terapia asistida con animales, en un esfuerzo por elevar el ánimo y el bienestar de los pacientes más jóvenes. Esta iniciativa, impulsada por la Dirección General de Derechos Humanos dependiente de la Secretaría de Gobierno Municipal, marca un proyecto sin precedentes en el Hospital Pediátrico local. Las visitas son los martes de 14 a 15 hs y los jueves de 11 a 12 hs.
La terapia asistida con animales, respaldada por el apoyo entusiasta de la comunidad, ha llegado para ofrecer ánimo y compañerismo a aquellos que enfrentan desafíos de salud.
Impulsado por esta visión integral del ser humano, el municipio colabora estrechamente con el personal médico del hospital para introducir dos caninos especialmente entrenados, Piky y otro ejemplar que pronto tendrá un nombre elegido por los propios niños.
Estos fieles amigos de cuatro patas se han convertido en pilares de apoyo en las salas de espera y áreas de juego, donde su presencia amorosa brinda una sensación de calma y seguridad a los pacientes jóvenes y sus familias.
La participación activa de los niños en la elección del nombre para el nuevo miembro del equipo canino es un reflejo del espíritu comunitario que impulsa esta iniciativa. A medida que los pequeños pacientes proponen y votan por su nombre favorito, se crea un sentido de pertenencia y cuidado compartido que trasciende las barreras del hospital.
“Es increíble presenciar la alegría de los niños al ver entrar a los perros en sus habitaciones. Literalmente saltan de sus camas para abrazarlos. Incluso aquellos en reposo absoluto son cuidadosamente ayudados para que puedan disfrutar del contacto con ellos”, remarcó Martín Brítez, adiestrador canino.
La reacción de los niños ante la introducción es simplemente enternecedora. Desde el primer contacto con los perros, se iluminaron con sonrisas contagiosas. Para muchos de los familiares que los acompañan, estos encuentros representan un respiro de la monotonía hospitalaria y una oportunidad para olvidar sus preocupaciones por un momento.
Por su parte, Florencia Salgado, directora de Derechos Humanos, resalta que esta iniciativa no solo busca aliviar el sufrimiento físico de los pacientes, sino también brindarles apoyo emocional y mejorar su calidad de vida en un momento tan delicado.
“La terapia asistida con animales no solo trata los síntomas físicos, sino que también nutre el espíritu. Es un recordatorio constante de que, incluso en medio de la enfermedad, hay espacio para la alegría y la conexión”, enfatiza Salgado.
Con el respaldo continuo del municipio, la terapia asistida con animales está en camino de convertirse en un recurso vital y duradero para el bienestar de los pacientes más jóvenes. En un mundo donde cada sonrisa cuenta, esta iniciativa demuestra el poder transformador del amor y la conexión entre humanos y animales.