Tras el hallazgo de la bala en el cuerpo de Franco Emanuel Sotelo, el acusado de violar de una nena de seis años de Pozo Azul, surgieron distintas versiones. Su familia denunció que los orificios que tenía en el brazo, eran impactos de bala.
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El informe del médico policial de turno –el día que el sospechoso perdió la vida sobre la Ruta 12-, fue otorgado este viernes y no habla de un balazo en la espalda. Sobre los orificios, sostuvo que no se condecían con las heridas originadas por un disparo.
“Del examen a simple vista, en sector del codo del brazo izquierdo, se observa una lesión sangrante, no presenta característica de orificio de entrada de proyectil de arma de fuego”, detalló.
Añadió que “en el sector de la espalda no se observa lesiones compatibles producidas por un proyectil de arma de fuego”.
Otras observaciones por parte del universitario: – Previo al impacto del peatón con el camión, no se observaron manchas de sangre, lo que indica que el occiso no presentaba sangrado antes del impacto.
– En el sector frontal del camión, en el sector de las letras “R” y “D”, de la inscripción que reza “Nordeste”, se observa una fricción, efecto de limpieza, producto del impacto del camión y del peatón estando este de pie”.
Segunda autopsia
Luego de una segunda autopsia practicada en el cuerpo del joven, se detectó una bala alojada en la espalda (es de calibre chico, sería 22). El plomo entró por la zona perianal y quedó alojado en la zona lumbar, de acuerdo con la conclusión forense.
Además, el ministro de Gobierno, Marcelo Pérez, se refirió sobre el caso a través de su cuenta oficial de Twitter y dijo que “el accionar policial fue correcto. Si existe Justicia en el más allá que juzgue a Sotelo, como lo hubiese hecho la Justicia acá. Ahora debemos rezar entre todos por la recuperación de la niña y acompañar a su familia”.
